Retablo de San Cosme y
San Damián
Los hermanos Cosme y Damián eran médicos. Fueron
martirizados a Cirio, en Siria meridional.

El Emperador Justiniano hizo erigir un santuario en su
honor a Cirio en señal de gratitud para una curación
obtenida gracias a los rezos que los había pedido.

Ya venerados a Argelés, vieron su favor aumentar, en
1.652, después de frenar la epidemia de peste el día
mismo de su fiesta el 27 de septiembre. Pasaron a ser
los nuevos patronos de la parroquia y en 1.700, cuando
se obtuvo de Roma una parte insigne de su reliquias, se
les construyó un retablo.

El conjunto, altar, gradas, retablo y estatuas (madera
esculpida, polícroma y dorada en los años 1.700) es
clasificado monumento histórico.


esquema del retablo